Guatemala, 6 de octubre de 2025.- El presidente Bernardo Arévalo anunció hoy que emprenderá una serie de medidas legales para fortalecer la seguridad pública y atender esta que es una de las demandas “más sentidas de las familias guatemaltecas”.
Dijo en la conferencia de prensa La Ronda que el Ejecutivo presentará al Congreso de la República dos iniciativas de ley “con una misión clara y compartida” como es la de tener por primera vez una ley antipandillas en Guatemala”.
Puntualizo que “estos dos proyectos, entre otros aspectos, contemplan novedades como la creación de una cárcel de máxima seguridad, específicamente para pandilleros con mecanismos de vigilancia extrema”, siempre “dentro de los parámetros constitucionales”.
La seguridad ciudadana, una de las “demandas más sentidas” de las familias, “es un tema fundamental en el proceso de cambio de nuestro país”, dijo el presidente Arévalo en la rueda de prensa celebrada en el Patio de La Paz del Palacio Nacional de la Cultura.
Ratificó el propósito del gobierno de “avanzar para construir un país que sea más seguro para las familias”.
Avances en “gran proceso de cambios” en seguridad
El mandatario resaltó que “para lograr este gran proceso de cambios debemos dar golpes claros a uno de los principales enemigos del pueblo de Guatemala y este es el crimen organizado”.
“Esta es una de nuestras prioridades y estamos teniendo avances concretos para demostrarlo”, indicó.
Al enumerar algunas de las acciones que se impulsan para el fortalecimiento de la seguridad ciudad y la modernización institucional, dijo que recién -la semana pasada- se graduó “la promoción más grande de la historia de la Policía Nacional Civil (PNC)”.
Este logro permitirá contar “con un mayor número de elementos policiales en las calles cuidando a las familias guatemaltecas.
Detalló que el gobierno promoverá una serie de medidas legales para combatir la delincuencia en las dos áreas claves para el control del delito”, como son “ajustes al sistema de penas y nuevas reglas para perseguir a las pandillas (ley antipandillas)”.
En este punto, adelantó que, “a discreción del director del Sistema Penitenciario”, se pedirá cuando corresponda “el aislamiento de reclusos por hasta treinta días prorrogables, el aumento de ocho a quince años las penas por extorsión y por usura.
Dijo que “cualquier extranjero que practique la usura en nuestro país será expulsado inmediatamente”, mientras que todos aquellos que sean culpables de extorsión verán inhabilitadas sus cuentas bancarias y servicios financieros.
“Modificaremos también el Código Procesal Penal para eliminar la posibilidad de medidas sustitutivas para los delitos de extorsión, obstrucción extorsiva del tránsito y exacciones intimidatorias”.
Además, “las penas tienen que ser cumplidas en su cabalidad, a pesar de los desafíos que encontramos constantemente en el sistema de justicia y en el Ministerio Público, que muchas veces garantiza la impunidad en vez de hacer justicia”.
Aseveró al respecto que “nuestra agenda de seguridad avanza mientras ellos siguen liberando a presuntos delincuentes cuando los capturamos una y otra vez.”
“Nosotros proponemos soluciones concretas para atender la necesidad de los guatemaltecos y las guatemaltecas que quieren poder vivir en paz y tranquilidad”, recalcó.
Por ello, “le estamos dando a la Policía las herramientas y el respaldo necesario para seguir golpeando al crimen organizado y al narco donde más les duele” y así “volver nuestras calles más seguras contra las narco-estructuras y la complacencia de otros poderes”.
El presidente Arévalo manifestó su confianza en que el Congreso de la República “apruebe estas reformas con celeridad” y ponga primero la seguridad del pueblo digno de Guatemala.