Guatemala, 10 de abril 2024.- El presidente Bernardo Arévalo anunció hoy un estado de calamidad para controlar y extinguir los incendios forestales registrados en diversas regiones y que ponen en riesgo a la población y dañan los recursos naturales de Guatemala.
Resaltó que el estado de calamidad “tiene el propósito de enfrentar los incendios forestales de una manera más ágil”, además de “fortalecer con insumos materiales a las brigadas” que combaten los siniestros “a través de la compra de equipo de protección personal y herramientas”.
La medida, de alcance nacional y con una vigencia de 30 días a partir de la fecha, permitirá solicitar la colaboración internacional, especialmente con el envío de aeronaves a fin de que las labores resulten en “la más pronta liquidación de los incendios”.
El presidente Arévalo recalcó que el decreto de estado de calamidad “adopta medidas para garantizar la transparencia en el uso de los recursos. En específico y como elemento novedoso, incluye los términos y criterios que el Ministerio de Finanzas Públicas establece para las compras”.
“En este sentido, delimita que solo las entidades que tienen un rol estratégico en el proceso del control de los fuegos (principalmente, ministerios) pueden ejecutar estos fondos”, y cuando termine la situación de emergencia, “el gobierno rendirá un informe financiero de lo actuado”.
El gobierno agradeció a las brigadas de personal -de las instituciones y de las comunidades – “por su trabajo incansable en el combate de los incendios”, y reiteró “su compromiso con el cuidado y la protección de la salud, de los bienes de las personas y de los recursos naturales del país”.
“Con prevención y transparencia, Guatemala sale adelante”, enfatizó el presidente Arévalo, quien estuvo acompañado de la vicepresidenta Karin Herrera en la rueda de prensa convocada para anunciar el estado de calamidad por los incendios forestales que en la actual temporada han sido recurrentes y de particular intensidad.
Mayoría de incendios son intencionales: Conred
Indicó que en sesión del Consejo de Ministros se decidió decretar “el estado de calamidad en el territorio nacional, a partir del monitoreo” de los siniestros realizado por la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred).
“Es importante señalar que la situación actual no es casual”, pues estudios de Conred han establecido que “el 80 por ciento de los incendios” fueron intencionales como en los casos del volcán de Agua, volcán Tajumulco, del vertedero de Amatitlán, del Parque Nacional de Laguna del Tigre, Petén, y de varios siniestros en Huehuetenango.
“Como Gobierno, rechazamos estos actos que ponen en peligro la vida de los guatemaltecos, debido a que la alta contaminación y las partículas generadas por la combustión tienen efectos adversos en la salud de las personas”.
Esta situación “ha obligado a suspender las clases en los departamentos de Guatemala, Escuintla y Sacatepéquez con el fin de proteger a la comunidad estudiantil”, puntualizó el presidente Arévalo, quien también llamó la atención sobre “el daño que estos incendios causan a la biodiversidad del país”, que ha sido muy afectada en la actual temporada.
Resaltó que por estos actos que generan los incendios “se han presentado las denuncias correspondientes para que los responsables enfrenten la justicia”.
En la conferencia de prensa conjunta llevada a cabo en el Patio de la Paz del Palacio Nacional de la Cultura, el ministro Óscar Cordón dijo que, por el estado de calamidad, el Ministerio de Salud deberá garantizar que los hospitales y clínicas cuenten con el personal y los insumos médicos necesarios para responder a la emergencia.
Informó además que, en el caso del incendio del vertedero de Amatitlán, hasta la fecha “han sido expuestas 205 personas”, de las que 48 fueron atendidas en el Centro de Salud de Amatitlán y 43 en el área de atención materno-infantil, mientras que otras 117 recibieron atención en dependencias médicas del departamento de Guatemala.
El ministro de Salud resaltó que, con el fin de garantizar una mejor atención, se han dispuesto “equipos de técnicos” en el Hospital General San Juan de Dios y en el Hospital Roosevelt para prestar servicios especializados a la población que lo demande, afectada por el humo de los incendios.
En su intervención, el ministro de Finanzas, Jonathan Menkos, informó que el presupuesto general vigente cuenta con una partida de 110 millones de quetzales, monto con el que se atenderá el estado de calamidad y que será ejecutado únicamente por los ministerios de la Defensa Nacional, de Agricultura, Ganadería y Alimentación, y de Ambiente y Recursos Naturales.
Además de las instituciones de Bomberos, Consejo Nacional de Áreas Protegidas, Instituto Nacional de Bosques y Conred. Al concluir el período del estado de calamidad, los ministerios e instituciones mencionadas deberán cumplir “una rendición de cuentas” a la nación sobre los recursos gastados y las acciones ejecutadas, reiteró.
