Guatemala, 26 de octubre de 2025.- El presidente Bernardo Arévalo denunció hoy amenazas contra la democracia e institucionalidad del país que atribuyó a grupos criminales y corruptos encabezados por el juez Fredy Orellana y la fiscal general Consuelo Porras.
Sostuvo que “en los últimos días la alianza criminal atrincherada en el Ministerio Público (MP), y en ciertos espacios del Sistema de Justicia, han intentado, otra vez, hundir a Guatemala en el autoritarismo, en la corrupción y en la impunidad”.
En un mensaje a la nación, el presidente Arévalo denunció a Orellana, a quien tachó de “sicario que tergiversa las leyes al servicio de Consuelo Porras”, titular de la Fiscalía General.
El presidente Arévalo afirmó que el juez Orellana “intenta forzar al Tribunal Supremo Electoral a distorsionar los resultados de las Elecciones del 2023”.
Esta situación—explicó— motivaría “la destitución inconstitucional” de un alcalde, de veintitrés diputados electos por el Movimiento Semilla, de la Vicepresidenta Karin Herrera y del presidente de la República.
Aseveró que la fiscal Porras, el juez Orellana “y sus demás patéticos conspiradores, han creado un contexto de terror para abrirse camino y hundir a nuestro país”.
Condenó los procesos judiciales ilegítimos que han utilizado “para encarcelar y torturar a ciudadanos honestos, intentando desmotivar la defensa de la democracia y procurando obtener falsas confesiones y denuncias como instrumento para un golpe de Estado”.
En consecuencia, esto motivó a que fueran enviados a prisión a Luis Pacheco y Héctor Chaclán, “autoridades indígenas que lideraron la defensa pacífica de la democracia y la Constitución frente al intento de golpe de 2023”, entre otros casos.
En el mensaje a la nación transmitido la noche del domingo, el mandatario consideró que “el objetivo de Porras y demás golpistas es perpetuar la impunidad de los ladrones, del dinero de todos” los ciudadanos, y a la vez proteger a narcotraficantes, pandilleros y aliados políticos de los corruptos.
“Hace algunos años esa alianza criminal, al ver su poder y su patrimonio mal habido amenazados por la justicia, capturó las instituciones del Estado, empezando por el MP y algunos jueces”.
“En el camino, han sometido a la cárcel, la tortura y el exilio a fiscales honestos, a periodistas y activistas valientes”, indicó el presidente Arévalo en el mensaje que transmitió desde el Palacio Nacional de la Cultura.
“Embestida judicial” contra instituciones democráticas
Con la vicepresidenta Herrera a su lado, y respaldado por ministros, funcionarios y legisladores, advirtió el Presidente que los grupos criminales y corruptos vinculados al juez Orellana y a la jefa del MP “están tan decididos a hundir al país”.
En ese sentido, dijo que “la embestida judicial” que impulsan ahora mediante acciones ilegales “evidencia la misma intención” de impedir el rescate de las instituciones democráticas.
Además de “crear condiciones para corromper los procesos de elección de órganos de justicia y control previstos para 2026 y enterrar, desde ya, la posibilidad de elecciones libres, transparentes y justas en 2027”.
Al respecto, destacó que “el pueblo valiente de Guatemala que les puso un alto en 2023 lo hará de nuevo”.
Reiteró que Porras y Orellana “son los obstáculos centrales a la lucha contra la corrupción, como lo reconoce la sociedad guatemalteca y el mundo que los ha declarado proscritos”.
“Son las caras visibles de una mafia corrupta, golpista y autoritaria, de una alianza criminal que se siente amenazada por un gobierno que únicamente obedece al mandato democrático otorgado por el pueblo en elecciones libres y transparentes”, subrayó.
Dijo que Guatemala “cuenta con apoyos importantes, democracias aliadas y socios estratégicos”, así como de organismos como Naciones Unidas y la Unión Europea, que han apoyado la lucha del gobierno “contra la corrupción y el crimen organizado y a favor de la democracia y la justicia”.
Ratificó el llamado a la comunidad internacional a fin de “no desviar su atención del golpe que se pretende llevar a cabo, ahora mismo, en Guatemala”.
Con ese motivo, solicitó al secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Albert Ramdin, convocar a una sesión extraordinaria del Consejo Permanente para evaluar las “graves amenazas” de Porras y Orellana contra la Constitución y la democracia de Guatemala.
“Este es un momento histórico de unidad nacional”, afirmó el presidente Arévalo, quien enfatizó que se juega “el cimiento de la democracia”.
Es la oportunidad de dejar atrás el régimen de corrupción que sufrimos durante décadas y de construir esa nación que queremos ser, afirmó en su mensaje a la nación.
“Contra quienes buscan hundirnos, siempre nos hemos levantado”, sentenció el mandatario, quien reiteró su condena a un pretendido golpe y a la corrupción, y abogó por un país en democracia.
